
La Hija de Betancourt pide a las FARC un “gesto” tras la muerte de los diputados
Mèlanie Betancourt, cuya madre, Ingrid, es rehèn de la guerrilla colombiana desde 2002, pidió hoy a las FARC un 'gesto significativo' y que muestren que 'aùn les queda una sombra de humanidad', tras la 'terrible' muerte de los once diputados secuestrados de la que son 'los primeros responsables'.
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Mèlanie, su hermano Lorenzo y el padre de ambos, Fabrice Delloye, acudieron esta tarde a una misa en la Iglesia Española de París en homenaje a los once diputados del Valle del Cauca, que eran rehenes de las FARC desde 2002.
La guerrilla anunció la semana pasada que los once habían muerto el pasado día 18 en un supuesto 'fuego cruzado' con 'un grupo militar sin identificar'.
El Gobierno colombiano negó que hubiera habido una operación del Ejèrcito y acusó a las FARC de haber matado a los once diputados.
'Lo ocurrido es más que terrible, abominable. No hay palabras para describirlo', dijo Mèlanie Bètancourt, para quien 'lo más importante hoy es decir hasta què punto estamos de todo corazón' con las familias de los diputados.
Preguntada sobre la labor de Francia, España y Suiza para tratar de impulsar un acuerdo humanitario -el canje de rehenes, incluida la colombo-francesa Ingrid Betancourt, por guerrilleros-, la joven dijo que es un 'esfuerzo extremadamente importante'.
'Espero de verás que todo su trabajo dará resultado y que, despuès de lo que ha pasado, las FARC mostrarán que aùn les queda una sombra de humanidad', afirmó Mèlanie.
Ella 'quiere esperar' que las cosas puedan moverse, ahora que el Gobierno colombiano ha excarcelado a guerrilleros, incluido el llamado 'canciller' de las FARC, Rodrigo Granda, a petición expresa del presidente francès, Nicolás Sarkozy, para tratar de desbloquear el dossier.
'Está claro que mientras no haya un gesto significativo de parte de las FARC estaremos en el punto de partida', advirtió la joven.
Y sentenció que, despuès de lo que ha ocurrido, la guerrilla 'ya no se puede permitir perder este tren'.
La misa en la Iglesia Española, ubicada en el distrito XVI de París, fue oficiada por un sacerdote colombiano, Henry Ramírez, misionero claretiano llegado a Francia hace un año y miembro de 'Justicia y Paz', del Movimiento Nacional de Víctimas de Crímenes de Estado.
Un movimiento que 'acompaña a víctimas de violaciones de los derechos humanos por agentes del Estado', explicó a Efe.
'Pero reconocemos que en el conflicto armado la insurgencia ha generado crímenes', agregó, al abogar por 'un diálogo' y por un acuerdo humanitario para la liberación de los rehenes.
El sacerdote adelantó que en su homilía diría que 'nos unimos al dolor de los familiares' de los diputados, cuya muerte se suma 'a la cadena de las tragedias colombianas', como los millones de desplazados y los miles de desaparecidos.
'Es necesario encontrar una solución. Creemos que hay que entablar un diálogo', sentenció el cura.
Terra Actualidad - EFE